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ARRABALDE EN LA
NUBE… Y EN EL CORAZÓN.
26 DE SEPTIEMBRE DE 2021.-
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CONTENIDO DE HOY:
- Refranero.-Hoy Sin refrán
- Un minuto de poesía: Hoy sin poema
- Fotos: Sergio (Breve semblanza de un
centenario)
- El tiempo en Arrabalde.- Hoy sin
comentarios sobre el tiempo.
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CUMPLIR CIEN AÑOS Y CONVIVIR
CON LOS RECUERDOS
(Breve semblanza de un centenario)
El verano llegó a su fin y los días son ya más cortos y
frescos, pero el tiempo aún de vez en cuando nos regala días agradables y
soleados y, en estos pueblos, un poco olvidados ya de la mano de Dios, se
respira paz y sosiego y la vida sigue siendo tranquila.
Hoy día 19, después de desayunar y sin prisas, Sergio
cogió su andador y se dirigió como hace casi a diario a su antigua casa de la
calle del Pozo, en Arrabalde, donde se crió y donde tenía su taller de
carpintería. Allí, cuando el tiempo lo permite, pasa las horas muertas entre el
antiguo utillaje de su vieja carpintería, evocando recuerdos y vivencias de
otros tiempos que aún permanecen frescos en su memoria a pesar de los años
transcurridos.
Pero hoy he roto su rutina y es que habíamos quedado
para hablar un rato y hacer una sesión de fotografías, y ya pasado el medio día
me estaba esperando charlando con su sobrino Jerónimo.
Entrar en aquel recinto de suelo de tierra pisada, fresco
y un tanto sombrío, es como penetrar en una cápsula del tiempo donde los días
se detuvieron hace muchos años. Allí Sergio evoca y me hace partícipe de sus
recuerdos rodeado de sus viejas herramientas: garlopas, cepillos, sierras,
azuelas, escofinas, berbiquís, gubias, martillos y mazos de madera…
“Aquí
trabajaba la madera, -me dice-, y cuando
las vigas eran muy largas, y casi todas lo eran, sacaba un extremo al interior
del corral por esa ventana, donde también las apoyaba, y así las podía
trabajar”.
Pero Sergio lo hacía todo a mano y artesanalmente,
pues miro y en el entorno no veo ninguna herramienta eléctrica, tan solo un
robusto banco de trabajo donde él desarrollaba sus innatas habilidades como
carpintero.
Más algo llama mi atención: en uno de los laterales
del local, bien iluminada por la luz que entra por la ventana hay una vieja
bicicleta sin ruedas y sin cadena, apoyada y bien sujeta a un bastidor de
madera ideado por él, donde se sube y a modo de bicicleta estática, pedalea y
mueve las piernas con entusiasmo. Su capacidad de superación sigue viva, y
aunque ya hace muchos años que la diseñó, aún la sigue utilizando como
complemento para mejorar su movilidad.
Aunque su verdadera tentación es otra: me señala una
vieja moto Derbi Cros que conoció tiempos mejores, y detrás de la misma otra
bicicleta por la que aún siente debilidad, y reconoce que en más de una ocasión
ha sentido el imperioso deseo de subirse en ella y dar una larga vuelta por el
pueblo, pero ya no se atreve.
Siente un punto de pesadumbre y tristeza al enseñarme
la casa. En lo que un día fuera el corral hay una frondosa higuera y otras
plantas que ponen una agradable nota de verdor y esperanza en medio del
deterioro general, y es que hace tiempo que todo llegó a su fin. Tan solo su
vieja carpintería se aleja del deterioro del resto de la casa y mantiene viva
su ilusión, allí se sienta y habla con sus vecinos, y deja pasar las horas con
la ensoñación de los recuerdos.
“Ya les he
dicho –refiriéndose
a sus hijos- que cuando me muera hagan
con todo esto lo que les parezca”, me añade con un deje de tristeza en la
voz.
Acabamos la entrevista y las fotos, coge su andador y,
poco a poco regresa a su casa, pues ya casi es la hora de comer. Me dice que
tiene que detenerse un par de veces en el camino, pero como el andador trae
incorporado un asiento, descansa en él unos minutos y recupera fuerzas para
seguir.
Sergio cumplió cien
años el pasado diez de septiembre, ya solo queda él de su quinta y es el
más longevo de Arrabalde, por eso, desde
la Asociación Cultural Castro de Las Labradas y dentro de los actos de la pasada
semana cultural celebrada en agosto, le rendimos un pequeño homenaje y se le
hizo entrega de una placa y un diploma, nombrándolo socio de honor en reconocimiento
a su edad, por ser miembro fundador y además el más antiguo de la Asociación.
¡¡Enhorabuena Sergio!!,
qué Dios te de mucha salud para seguir cumpliendo años con la vitalidad y
jovialidad que aún conservas.
Arrabalde, 19 de septiembre de 2021
Fotos: Sergio
Sergio con su andador camino de su casa.
Nota: Parte de este artículo y tres fotos ya habían sido publicados en el diario digital “La Opinión" de Benavente.
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