EL TIEMPO EN ARRABALDE Y SU
ENTORNO
01 DE NOVIEMBRE DE 2016.-MARTES
CONTENIDO: REFRANERO, LÉXICO, EL TIEMPO, NOTICIAS Y/O CURIOSIDADES, UN
MINUTO DE POESÍA Y FOTOS.
ANTIGUO
REFRANERO ESPAÑOL.- Manos frías, corazón caliente.
Parece ser que este
refrán tiene más relación con la regulación homeotérmica del cuerpo humano que
como termómetro sentimental. No obstante el uso que se hace del mismo es en relación con esto último, es decir, que en cuestiones de amor, lo
que importa es el estado del corazón, entendido como núcleo de los
sentimientos. Que haya ardor y pasión, que es lo que cuenta.Hay oto refrán que lo matiza más: Manos frías y corazón ardiente.
LÉXICO
ARRABALDÉS. Una sencilla recopilación de
las viejas palabras que se usaban en Arrabalde; muchas de ellas restos del
antiguo dialecto leonés; otras solo usadas en la comarca de Benavente y los
Valles, y en la Valdería; muchas ya desaparecidas y otras con tendencia a
desaparecer. Y también algunas que
solo son simples localismos inventados en el pueblo, fruto del ingenio de los
arrabaldeses. (Todo
ello sin pretensiones didácticas, tan solo un recordatorio con el único
propósito de que no se olviden).
(Cada día definimos una palabra nueva, una frase o un
lugar de Arrabalde).- Hoy recordamos la palabra: LEVANTAMERIENDAS
Levantameriendas: “Merendera
montana”. Flor otoñal que surge a finales
del verano, anunciando la inmediatez del otoño. Muy
abundante en las eras de Arrabalde. Es parecida al azafrá.
Foto obtenida en: https://es.wikipedia.org/wiki/Colchicum_montanum#/media/File:Merendera_montana2.jpg
Foto
obtenida en: http://fotosdeinstantes.blogspot.com.es/2015/09/merendera-montana-quitameriendas-el-fin.html
Foto obtenida en: https://es.wikipedia.org/wiki/Colchicum_montanum#/media/File:Merendera_montana2.jpg
------------oooOooo-------------
EL
PULSO DEL TIEMPO EN ESTE DÍA QUE PASÓ:
Tiempo que llevamos de OTOÑO: 40 días.
El otoño durará 89 días y 20 horas.
Tiempo
que falta para la entrada del INVIERNO: 49 días
El invierno
comienza el día 21 de diciembre.
TEMPERATURAS
REGISTRADAS HOY:
Mínimas: 2º
Máximas: 20º
Temperatura
registrada a las 24,00
horas de hoy: El termómetro marca 7,8º; nuestros
cielos a esta hora están poco nubosos.
La noche está fría y serena.
Viento: En
calma
Humedad relativa: 71%
Presión atmosférica: 1023
hPa
QUÉ TIEMPO TUVIMOS HOY: Amaneció
la mañana con los cielos nubosos y así se mantuvo, con leves claros, hasta las
primeras horas de la tarde en que las nubes dejaron parcialmente paso al sol.
El día transcurrió tranquilo y con temperaturas cálidas. Pero la noche fue muy
fría y heló un poco, lo suficiente para ir dejando fuera de combate a las
plantas más sensibles al frío.
ESTO ES LO QUE SE ANUNCIA PARA MAÑANA DIA 02 DE NOVIEMBRE: (Conmemoración de los fieles
difuntos)
LLUVIA: 20% de probabilidades. No lloverá.
CANTIDAD DE AGUA
QUE PUEDE CAER: 0 l/m2.
NUBES: 50%. Cielos poco
nubosos hasta las 4 y despejados
hasta las 7. El resto del día transcurrirá con nuestros cielos poco nubosos unas veces y con intervalos nubosos otras, incluso con
posibilidad de cielos nubosos, pero siempre
con escaso riesgo de lluvia.
VIENTO:
Soplará entre 2 y 6 Km/h. Permanecerá prácticamente en calma entre las 0 y 4
horas y entre las 21 y 23 horas.
TEMPERATURAS: Se
esperan mínimas de 4º durante la noche y máximas
de 21º durante el día.
TRUENOS: No
SOL: Saldrá a
las 7,58 horas; por
la tarde se pondrá a las 18,15
horas.
LUNA:
03% de iluminación. Cuarto creciente el día 7 en Acuario.
----------oooOooo----------
UN MINUTO DE POESÍA.- (Espacio abierto a quien desee
publicar alguna de sus obras poéticas, tanto en verso como en prosa poética.
Puede hacerlo con su nombre o con seudónimo, como prefiera. Los envíos podéis remitirlos al correo
castrocelta@hotmail.com).
Gustavo
Adolfo Bécquer.- Poeta
español, representante del Romanticismo del siglo XIX, cobró reconocimiento
después de su muerte cuando vieron la luz muchas de sus obras. Un claro ejemplo
fue su libro "Rimas", que se perdió en 1868 y gracias a su memoria y
las publicaciones donde algunas ya habían aparecido, pudo reconstruir su obra
más famosa, que terminó lanzándose junto a sus "Leyendas" en 1871, a
un año de su desaparición.
Rima LXXI “Qué solos se quedan los muertos”
Rima LXXI “Qué solos se quedan los muertos”
Cerraron sus ojos
que aún tenía abiertos,
taparon su cara
con un blanco lienzo,
y unos sollozando,
otros en silencio,
de la triste alcoba
todos se salieron.
La luz que en un vaso
ardía en el suelo,
al muro arrojaba
la sombra del lecho;
y entre aquella sombra
veíase a intérvalos
dibujarse rígida
la forma del cuerpo.
Despertaba el día,
y, a su albor primero,
con sus mil rüidos
despertaba el pueblo.
Ante aquel contraste
de vida y misterio,
de luz y tinieblas,
yo pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
que aún tenía abiertos,
taparon su cara
con un blanco lienzo,
y unos sollozando,
otros en silencio,
de la triste alcoba
todos se salieron.
La luz que en un vaso
ardía en el suelo,
al muro arrojaba
la sombra del lecho;
y entre aquella sombra
veíase a intérvalos
dibujarse rígida
la forma del cuerpo.
Despertaba el día,
y, a su albor primero,
con sus mil rüidos
despertaba el pueblo.
Ante aquel contraste
de vida y misterio,
de luz y tinieblas,
yo pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
*
De la casa, en hombros,
lleváronla al templo
y en una capilla
dejaron el féretro.
Allí rodearon
sus pálidos restos
de amarillas velas
y de paños negros.
Al dar de las Ánimas
el toque postrero,
acabó una vieja
sus últimos rezos,
cruzó la ancha nave,
las puertas gimieron,
y el santo recinto
quedóse desierto.
De un reloj se oía
compasado el péndulo,
y de algunos cirios
el chisporroteo.
Tan medroso y triste,
tan oscuro y yerto
todo se encontraba
que pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
*
De la alta campana
la lengua de hierro
le dio volteando
su adiós lastimero.
El luto en las ropas,
amigos y deudos
cruzaron en fila
formando el cortejo.
Del último asilo,
oscuro y estrecho,
abrió la piqueta
el nicho a un extremo.
Allí la acostaron,
tapiáronle luego,
y con un saludo
despidióse el duelo.
La piqueta al hombro
el sepulturero,
cantando entre dientes,
se perdió a lo lejos.
La noche se entraba,
el sol se había puesto:
perdido en las sombras
yo pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
*
En las largas noches
del helado invierno,
cuando las maderas
crujir hace el viento
y azota los vidrios
el fuerte aguacero,
de la pobre niña
a veces me acuerdo.
Allí cae la lluvia
con un son eterno;
allí la combate
el soplo del cierzo.
Del húmedo muro
tendida en el hueco,
¡acaso de frío
se hielan sus huesos...!
De la casa, en hombros,
lleváronla al templo
y en una capilla
dejaron el féretro.
Allí rodearon
sus pálidos restos
de amarillas velas
y de paños negros.
Al dar de las Ánimas
el toque postrero,
acabó una vieja
sus últimos rezos,
cruzó la ancha nave,
las puertas gimieron,
y el santo recinto
quedóse desierto.
De un reloj se oía
compasado el péndulo,
y de algunos cirios
el chisporroteo.
Tan medroso y triste,
tan oscuro y yerto
todo se encontraba
que pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
*
De la alta campana
la lengua de hierro
le dio volteando
su adiós lastimero.
El luto en las ropas,
amigos y deudos
cruzaron en fila
formando el cortejo.
Del último asilo,
oscuro y estrecho,
abrió la piqueta
el nicho a un extremo.
Allí la acostaron,
tapiáronle luego,
y con un saludo
despidióse el duelo.
La piqueta al hombro
el sepulturero,
cantando entre dientes,
se perdió a lo lejos.
La noche se entraba,
el sol se había puesto:
perdido en las sombras
yo pensé un momento:
¡Dios mío, qué solos
se quedan los muertos!
*
En las largas noches
del helado invierno,
cuando las maderas
crujir hace el viento
y azota los vidrios
el fuerte aguacero,
de la pobre niña
a veces me acuerdo.
Allí cae la lluvia
con un son eterno;
allí la combate
el soplo del cierzo.
Del húmedo muro
tendida en el hueco,
¡acaso de frío
se hielan sus huesos...!
* * *
¿Vuelve el polvo al polvo?
¿Vuela el alma al cielo?
¿Todo es sin espíritu,
podredumbre y cieno?
No sé; pero hay algo
que explicar no puedo,
algo que repugna
aunque es fuerza hacerlo,
el dejar tan tristes,
tan solos los muertos.
¿Vuelve el polvo al polvo?
¿Vuela el alma al cielo?
¿Todo es sin espíritu,
podredumbre y cieno?
No sé; pero hay algo
que explicar no puedo,
algo que repugna
aunque es fuerza hacerlo,
el dejar tan tristes,
tan solos los muertos.
Gustavo Adolfo Bécquer
No hay comentarios:
Publicar un comentario